Fajas de Racón y Canariellos


Completísima Ruta en el parque Nacional de Ordesa, Posiblemente dos de las fajas menos transitadas (Ya sabeis que Faja Flores y faja pelay/cazadores se llevan la palma) pero muy entretenidas y de gran belleza. Se trata de una excursión a través de la faja Racón y Canariellos para poder disfrutar de las espléndidas vistas que éstas nos otorgan, desde una elevación intermedia del Parque Nacional de Ordesa. La ruta está realizada en otoño, con unas condiciones inmejorables, por lo tanto la dificultad no es mayor que el esfuerzo físico a realizar. No son fajas peligrosas, pero las dos atraviesan alguna zona de “torrenteras”, que en época de lluvias o deshielo, pueden acarrear dificultades. Nada que decir con nieve, ya que seguramente estén cerradas en ese caso.



La ruta comienza en la pradera de Ordesa. Hay que dirigirse hacia el Oeste en dirección contraria a las rutas clásicas del valle. Muy cerca de la pradera de Ordesa se encuentra la Casa Oliván, el punto de inicio de la ruta. La ruta está muy bien marcada y señalizada. Adentrándonos en bosque bastante espeso y por una senda bien trazada, con largas “zetas” iremos ganando altura, un desnivel nada desdeñable para comenzar.



El Tozal del Mallo preside nuestra ascensión siempre imponente cada vez que levantamos la cabeza del suelo. La vista del Tozal y el circo de Carriata nos indican que cada vez estamos más cerca de llegar a la Faja Racón. Desde allí solo tendremos que dejarnos llevar por el sendero mientras disfrutamos de las vistas que el lugar nos ofrece. En este punto podemos tomar camino al Tozal del Mallo o a la Faja de las Flores, pero esta vez tomamos el camino de la derecha pasando bajo las paredes del Gallinero. 



La faja Racón discurre paralela a la faja de las flores, pero unos metros por debajo, hay que estar atentos a posible material rocoso que pueda caer desde arriba, ya sea por el paso de animales o humanos por encima nuestro. El uso de casco para esta zona no sería descabellado.




Esta faja nos conducirá, pegados a la pared del cañón, hasta la cascada de Cotatuero, con unas vistas preciosas y bastante aéreas del valle, puede haber gente que le resulte demasiado imponente por tener vértigo, pero no se trata de un sendero peligroso ni demasiado expuesto. 




Llegados al circo de Cotatuero, cruzaremos la cascada través de un puente metálico, para enlazar con la Faja Canariellos (también podríamos descender a la pradera o tomar dirección a las clavijas, que dan acceso a la otra parte de la Faja flores). Nos encontramos muy cerca de la cascada otro cúmulo de paredes gigantescas y bosques. La cascada de Cotatuero es la más alta del Valle de Ordesa (200 mts.).. Con suerte podremos ver a montañeros pasando por las Clavijas de Cotatuero.


La faja Canariellos es una prolongación de la faja Racón, del mismo estilo, pero teniendo que atravesar alguna torrentera que en esta época no llevaban agua (informarse en la caseta de los guardias sobre este tema). Impresionantes las vistas del valle que se pueden ver en algunos momentos.



Esta faja discurre en leve descenso para conducirnos a la pradera de Ordesa atravesando el bosque de Hayas. Este bosque es uno de los más impresionantes de Europa. Pasear por este patrimonio natural de Aragón en otoño, cuando luce más arrebatador que nunca, es una experiencia mágica.



Una vez acabada esta faja, tendremos la opción de seguir hacia Cola de Caballo o de volver por el fondo del valle, que será la opción elegida esta vez. Visitaremos la cascada de la Cueva y la cascada del Estrecho en nuestro regreso, para acabar nuestra ruta de nuevo en la pradera de Ordesa con unas preciosas imágenes grabadas en nuestra retina.



Resumiendo, una de las más espectaculares rutas que podemos realizar en el Pirineo Aragonés. La mejor época, sin duda, el otoño. Salen unos 16 kms. en 7 horas, teniendo en cuenta que se hacen muchas paradas para hacer fotos o disfrutar del entorno. Además se pueden realizar bastantes combinaciones por esta zona con varios niveles de dificultad y peligrosidad.