El hundimiento del Maine

La explosión del acorazado USS Maine ocurrió el 15 de febrero de 1898 en la bahía de La Habana, Cuba. El barco estadounidense explotó y se hundió, matando a 266 de los 400 hombres a bordo. Aunque las causas exactas de la explosión no se han determinado con certeza, el incidente se consideró un factor clave en el desencadenamiento de la Guerra Hispano-Estadounidense.

En aquel momento, la relación entre los Estados Unidos y España era tensa debido a las demandas de independencia de Cuba y a las condiciones económicas y políticas precarias en la isla. La explosión del Maine se convirtió en una excusa para que los Estados Unidos entraran en guerra contra España. Aunque posteriormente se investigó y se determinó que la explosión probablemente fue causada por un accidente interno, como una falla en la coalición de los barriles de pólvora, en aquel momento se difundió la teoría de que el barco había sido sabotajeado por los españoles.

La Guerra Hispano-Estadounidense duró solo unos pocos meses y terminó con la derrota de España y la pérdida de sus colonias, incluida Cuba. Sin embargo, la explosión del Maine sigue siendo un momento importante en la historia de los Estados Unidos y de la relación entre los países en el Caribe.

¿La primera "Fake New"?

Aunque la explosión del acorazado USS Maine en 1898 fue ampliamente considerada como un sabotaje por parte de los españoles en el momento, posteriores investigaciones han indicado que probablemente fue un accidente. En 1976, un equipo de investigación liderado por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos llevó a cabo una investigación exhaustiva del hundimiento del barco. Utilizaron técnicas de investigación modernas, incluido el escaneo de sonar, para examinar el barco y encontrar pruebas de la causa de la explosión. El equipo determinó que la explosión probablemente fue causada por una falla en la coalición de los barriles de pólvora en el casco del barco. La falla, combinada con un diseño defectuoso y la mala disposición de la pólvora, provocó una serie de explosiones que causaron el hundimiento del barco.

Es importante destacar que la investigación de 1976 no fue la primera en concluir que la explosión fue un accidente. Ya en 1898, una investigación realizada por un comité militar independiente también llegó a la misma conclusión. Sin embargo, en el momento, la teoría del sabotaje era más popular y se utilizó como propaganda para justificar la entrada de los Estados Unidos en la Guerra Hispano-Estadounidense.

En resumen, aunque la explosión del Maine fue ampliamente considerada como un sabotaje en el momento, las investigaciones posteriores han indicado que probablemente fue un accidente causado por una falla en la coalición de los barriles de pólvora.