En 1847 nace Bram Stoker

En palabras de Oscar Wilde, "Drácula no ha sido la novela más bella que se ha escrito jamás" y sin embargo la obra más famosa de Stoker se ha convertido en una de las historias de terror más icónicas de todos los tiempos. A pesar de ello su autor murió pobre y olvidado.

Abraham "Bram" Stoker nació el 8 de noviembre de 1847 en Clontarf, Irlanda. Su padre era un funcionario del gobierno británico, y su madre era una mujer devota que le inculcó su amor por la literatura y el folclore irlandés. Stoker estudió derecho en la Universidad de Dublín, pero nunca ejerció la profesión. En cambio, se dedicó al periodismo y al teatro. En 1878, Stoker conoció a Henry Irving, un actor británico que se convertiría en su mentor y amigo. Irving le ofreció un puesto de secretario personal, y Stoker lo acompañó en sus giras por todo el mundo. Durante sus viajes, Stoker se interesó por el folclore y las tradiciones de diferentes culturas. Estas experiencias le inspiraron para escribir "Drácula", que se publicó en 1897. Stoker escribió otras novelas y obras de teatro, pero ninguna de ellas tuvo el éxito de "Drácula". Murió en 1912, a la edad de 64 años.

Drácula

"Drácula" es una novela gótica que cuenta la historia de un conde vampiro que viaja a Inglaterra para conquistar el mundo. La novela fue un éxito inmediato y se convirtió en un clásico de la literatura de terror.  Ha sido adaptada a numerosas películas, series de televisión y obras de teatro.

La novela sería mundialmente aclamada años después de su muerte, pasó en su momento sin pena ni gloria. No sería hasta 1922, cuando el director de cine alemán F. W. Murnau llevó a la pantalla la obra maestra del cine mudo Nosferatu, y posteriormente cuando el actor húngaro Bela Lugosi encarnó con éxito al malvado conde en diversas películas, cuando el personaje vampiresco creado por Stoker se hizo mundialmente famoso, convirtiéndose en un mito de la cultura universal.

Nosferatu, el vampiro (1922)

Esta película muda alemana es una de las obras maestras del cine expresionista. La dirección de Murnau y la interpretación de Max Schreck como el Conde Drácula son de una gran fuerza expresiva. La película es una adaptación libre de la novela de Stoker, pero conserva los elementos fundamentales de la historia, como la llegada del vampiro a una ciudad europea y su lucha contra un grupo de hombres valientes.

Drácula (1931)

Esta película estadounidense es la primera adaptación sonora de la novela de Stoker. La dirección de Tod Browning y la interpretación de Bela Lugosi como el Conde Drácula son legendarias. La película es un clásico del cine de terror y ha influido en numerosas películas posteriores.

Drácula de Bram Stoker (1992)

Esta película estadounidense es una adaptación fiel de la novela de Stoker. La dirección de Francis Ford Coppola y las interpretaciones de Gary Oldman, Winona Ryder y Anthony Hopkins son de una gran calidad. La película es un ejemplo del cine de terror gótico y ha sido aclamada por la crítica.

El mito del vampirismo

El mito del vampirismo tiene sus raíces en el folclore de muchas culturas diferentes, desde Europa hasta Asia. Los vampiros se suelen representar como criaturas sobrenaturales que se alimentan de la sangre de los vivos. Tienen una serie de características comunes, como la capacidad de transformarse en murciélagos o lobos, la invulnerabilidad a las armas normales y la debilidad a la luz del sol.

Las primeras referencias al vampirismo se encuentran en la antigua Grecia y Roma. En la mitología griega, por ejemplo, se hablaba de los Empusae, espíritus femeninos que se alimentaban de sangre. En la mitología romana, se hablaba de los Lamia, espíritus femeninos que se alimentaban de niños.

En la Edad Media, el mito del vampirismo se extendió por toda Europa. Se creía que los vampiros eran personas que habían muerto de una muerte violenta o que habían sido maldecidos. Se pensaba que los vampiros podían causar enfermedades, muerte y desastres naturales.

En el siglo XIX, el mito del vampirismo se popularizó gracias a la novela "Drácula" de Bram Stoker. Esta novela, que se publicó en 1897, es una de las obras más influyentes de la literatura de terror. La novela ayudó a consolidar el mito del vampiro como una criatura sobrenatural y peligrosa.

En la actualidad, el mito del vampirismo sigue siendo una parte importante de la cultura popular. Se ha representado en numerosas películas, series de televisión, libros y videojuegos. Los vampiros se han convertido en personajes populares de la ficción, y su imagen ha sido reinterpretada de muchas maneras diferentes.