Una ruta excepcionalmente variada, hacia una de las cumbres más acogedoras de la Sierra de Guara. La travesía nos lleva al Pico Fragineto partiendo del estacionamiento de La Tejería, transitando por la ermita de Fabana y ascendiendo por la cresta de La Ronera. El descenso se realiza posteriormente por el collado de Petreñales para volver a transitar por el barranco de Calcón, y regreso a la Tejería.
CÓMO LLEGAR
Desde la autovía A-22, se debe tomar la salida hacia Loporzano justo después del estrecho de Quinto, pero antes de llegar a la localidad, se debe girar a la derecha por la carretera A-1227, pasando por Bandaliés, Sipán, Coscullano, y seguir las indicaciones hacia el embalse de Guara. Siguiendo el camino asfaltado, se llegará a una rotonda que indica "Presa de Guara" y "San Cosme". Continuar por la pista de tierra durante aproximadamente 4 km hasta llegar a un área de estacionamiento autorizado llamada La Tejería. A pesar de ser una pista sin asfaltar, se encuentra en buenas condiciones y es adecuada para todo tipo de vehículos.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA
Dejamos nuestro coche en el parking de la Tejería y tomamos el sendero que se despliega a nuestra derecha, hacia la emita de la Fabana. El sendero, agreste, cómodo y sombras, se abre paso entre un bosque de pinos hasta alcanzar nuestro primer hito en el camino: el sendero que nos guía a la ermita de La Fabana (semiderruida), siempre un punto de partida en la travesía hacia el Tozal de Guara o el Fragineto.
La ermita, en un estado ruinoso, requiere precaución al explorador que se aventura a entrar en sus terrenos, o quizás sea prudente evitar su entrada. Partiendo de la ermita de la Fabana, el camino desciende hasta las aguas del río Calcón, donde se encuentra un cruce de caminos; en este punto, la ruta gira hacia la izquierda. Continuando siguiendo el rumor del río Calcón, ascendemos por el sendero bien señalizado que conduce a Petreñales.
El sendero abandona el bosque para adentrarse en las gargantas del río Calcón, también conocidas como de la Fabana. A medida que avanzamos, el terreno se vuelve pedregoso y desafiante al ascender entre las aguas del río, por lo que es esencial llevar calzado adecuado. Durante la estación seca, es probable que podamos avanzar de roca en roca, pero en épocas de lluvia es probable que nos mojemos los pies.
Este paso tallado en la roca, conocido como "las Gargantas", destaca por la belleza de las pequeñas pozas formadas en el cauce. Tras este tramo, el sendero prosigue a través del bosque hasta llegar a la indicación que conduce al Fragineto. Una vez superado el barranco, llegamos a un cruce por el cual regresaremos más adelante, comenzando entonces una empinada subida hacia el collado de Fragineto.
Para continuar la travesía, será necesario proseguir en dirección al Fragineto y ascender por una pendiente notablemente empinada hasta alcanzar el cuello de Lizama. Al llegar al collado, seguiremos ascendiendo por un sendero pedregoso que posteriormente se dirigirá hacia la cresta, superando varios tramos en los que será preciso utilizar las manos.
Es importante atender a las señales pintadas en las rocas y mantener la debida atención en los hitos para orientarse con eficacia durante la travesía.
Desde las crestas, se pueden apreciar vistas impresionantes del embalse de Vadiello y del pico Mondinero, que se encuentran justo enfrente. Incluso se puede divisar el embalse del Calcón. Proseguimos por la cresta en dirección al pico, una parte que resulta algo complicada debido al suelo estrecho y rocoso, por lo que es necesario avanzar con cuidado por los espacios abiertos a cada lado. Se debe tener precaución si se sufre de vértigo.
Luego continuamos por un camino más accesible que nos llevará a la cima, desde donde se aprecian vistas panorámicas impresionantes. Desde la cima se pueden disfrutar de unas magníficas vistas de los Pirineos, el Tozal de Guara, entre otros.
Continuamos avanzando por la cresta de la Raonera en dirección noreste, descendiendo con facilidad hasta alcanzar el Corcurezo y posteriormente el collado de Petreñales. Este último se distingue por ser un prado abierto circundado por un bosque denso, donde destaca un poste con indicaciones hacia diferentes destinos: Corcurezo, Nocito, Tozal de Guara y Tejería.
La senda desciende abruptamente por aproximadamente 1 km hasta encontrarnos con un desvío que conduce al Tozal. Desde este punto, la pendiente continúa en descenso constante, aunque gradualmente se va suavizando. Durante esta travesía, un pintoresco bosque de bojes y acebos nos acompaña a lo largo de la bajada.
Finalmente, transitamos nuevamente por los mismos puntos visitados en la primera parte de nuestra excursión: el cruce con el poste hacia el Fragineto, la garganta del Calcón, la ermita de la Fabana y Tejería. Con esto concluye nuestro recorrido.
Una magnífica ruta circular que te llevará al corazón de la impresionante sierra de Guara. Con una extensión de 18 kilómetros, esta travesía te sumerge en la naturaleza durante aproximadamente 7 horas. El recorrido, muy entretenido, está repleto de lugares pintorescos que te dejarán maravillado. Calificada como moderada debido a su exigencia física y la posibilidad de enfrentarse a vértigos en ciertos tramos, esta ruta ofrece una experiencia emocionante para los amantes del senderismo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que hacer la ruta después de lluvias puede complicarla aún más, añadiendo un desafío adicional a los excursionistas.
Prepárate para disfrutar de una aventura inolvidable mientras exploras los magníficos paisajes que la sierra de Guara tiene para ofrecerte.
